Retos económicos de la propiedad intelectual en la era digital: aspectos jurídicos, económicos y sociales

En la era digital contemporánea, las naciones están involucradas en una competencia activa, no solo en el ámbito de la economía, sino también en el dominio de la tecnología, estableciendo así un nuevo paradigma de dinámica de poder global. En este marco, los obstáculos económicos, legales y sociales asociados a la salvaguarda de la propiedad intelectual (en adelante, PI) han experimentado un aumento significativo. Este artículo tiene como objetivo examinar los desafíos económicos que plantea la propiedad intelectual en la era digital, considerando el telón de fondo de la competencia global intensificada y el imperativo de mantener la competitividad nacional en las dimensiones legal, económica y social. El artículo emplea una metodología de análisis estadístico, utilizando datos de propiedad intelectual obtenidos de la base de datos estadísticos de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), específicamente del Centro de datos estadísticos de PI de la OMPI. Los autores examinan los pagos e ingresos transfronterizos asociados con la explotación de la propiedad intelectual en diversas naciones. Además, el estudio investiga la composición y la dinámica de la propiedad intelectual en varios tipos (como patentes, diseños industriales, marcas registradas y modelos de utilidad) y regiones, lo que facilita una evaluación del panorama competitivo y los esfuerzos cooperativos entre los países líderes del mundo en el ámbito de la propiedad intelectual. Los desafíos económicos atribuidos a la propiedad intelectual se analizan en el contexto del comercio, la inversión, la cooperación tecnológica y la dinámica competitiva que involucra a Estados Unidos, China y la Unión Europea. Los hallazgos revelan un aumento notable en los pagos transfronterizos y los ingresos por propiedad intelectual, lo que refleja un grado relativamente limitado de cooperación entre las regiones más importantes del mundo. Esto indica una ventaja competitiva considerable que disfrutan los Estados Unidos, la Unión Europea y China. A pesar de la hegemonía y el liderazgo de los EE. UU. en el dominio de la propiedad intelectual, subrayada por una política proteccionista destinada a salvaguardar los derechos de propiedad intelectual, principalmente a través del control que ejercen las empresas estadounidenses, China está realizando progresivamente su potencial tecnológico. Esto se evidencia por las crecientes actividades de patentes emprendidas por las empresas chinas. Si bien China, Japón, Estados Unidos y Corea ocuparon las posiciones más destacadas en términos de la proporción de los principales solicitantes PCT en 2022, China está emergiendo gradualmente como líder en el ámbito de la propiedad intelectual. El liderazgo del país se puede atribuir al esfuerzo innovador de las empresas que operan en el sector de la innovación y la tecnología, con un énfasis notable en las tecnologías móviles. En los últimos años, China ha superado a Japón y Estados Unidos en cuanto al número de solicitudes presentadas por empresas que buscan obtener los derechos de propiedad de sus invenciones, desarrollos e innovaciones.