{"title":"法律与论证","authors":"Telmo Alfonso López Sotomayor, Omar Soto García","doi":"10.21897/ds.v1i3.1491","DOIUrl":null,"url":null,"abstract":"El propósito de este artículo es aportar algunas reflexiones en torno a la discusión de la única respuesta correcta, a partir de la postura de Robert Alexy, estableciendo sus concordancias y contraposiciones en relación con la tesis originalmente planteada por Ronald Dworkin, quien parte de la idea de un juez dotado de la capacidad y deber de interpretar acertadamente la norma superior en todos los casos. Para este autor, los textos constitucionales –en especial– los que enuncian los derechos fundamentales contienen básicamente una verdad sustancial y palpable aplicable a cada controversia jurídica, de tal manera que el intérprete debe ocuparse en descubrir esta única verdad, mediante la lectura moral de los principios. Al contrario, Robert Alexy sostiene que existen –al menos– tres formas de dar respuesta a un problema jurídico, primero racional, después práctico moral y finalmente jurídico; dando pie entonces para la apertura del debate sobre lo que es el derecho real y lo que debería ser. En tal caso, el dispositivo que articula estas tres formas, es la teoría de la argumentación jurídica. Desde la perspectiva alexiana, es imposible que exista una única respuesta para todo proceso jurídico. Los hallazgos indican que no existen aún medidas que hagan de esto, algo real; la idea de una única respuesta correcta es una utopía que promete un derecho perfecto donde cada veredicto y cada sentencia sea eficiente y complazca a todas las personas, sin embargo, esto actualmente no es posible","PeriodicalId":34415,"journal":{"name":"Derecho Sociedad","volume":"1 1","pages":""},"PeriodicalIF":0.0000,"publicationDate":"2018-11-30","publicationTypes":"Journal Article","fieldsOfStudy":null,"isOpenAccess":false,"openAccessPdf":"","citationCount":"0","resultStr":"{\"title\":\"DERECHO Y ARGUMENTACIÓN\",\"authors\":\"Telmo Alfonso López Sotomayor, Omar Soto García\",\"doi\":\"10.21897/ds.v1i3.1491\",\"DOIUrl\":null,\"url\":null,\"abstract\":\"El propósito de este artículo es aportar algunas reflexiones en torno a la discusión de la única respuesta correcta, a partir de la postura de Robert Alexy, estableciendo sus concordancias y contraposiciones en relación con la tesis originalmente planteada por Ronald Dworkin, quien parte de la idea de un juez dotado de la capacidad y deber de interpretar acertadamente la norma superior en todos los casos. Para este autor, los textos constitucionales –en especial– los que enuncian los derechos fundamentales contienen básicamente una verdad sustancial y palpable aplicable a cada controversia jurídica, de tal manera que el intérprete debe ocuparse en descubrir esta única verdad, mediante la lectura moral de los principios. Al contrario, Robert Alexy sostiene que existen –al menos– tres formas de dar respuesta a un problema jurídico, primero racional, después práctico moral y finalmente jurídico; dando pie entonces para la apertura del debate sobre lo que es el derecho real y lo que debería ser. En tal caso, el dispositivo que articula estas tres formas, es la teoría de la argumentación jurídica. Desde la perspectiva alexiana, es imposible que exista una única respuesta para todo proceso jurídico. Los hallazgos indican que no existen aún medidas que hagan de esto, algo real; la idea de una única respuesta correcta es una utopía que promete un derecho perfecto donde cada veredicto y cada sentencia sea eficiente y complazca a todas las personas, sin embargo, esto actualmente no es posible\",\"PeriodicalId\":34415,\"journal\":{\"name\":\"Derecho Sociedad\",\"volume\":\"1 1\",\"pages\":\"\"},\"PeriodicalIF\":0.0000,\"publicationDate\":\"2018-11-30\",\"publicationTypes\":\"Journal Article\",\"fieldsOfStudy\":null,\"isOpenAccess\":false,\"openAccessPdf\":\"\",\"citationCount\":\"0\",\"resultStr\":null,\"platform\":\"Semanticscholar\",\"paperid\":null,\"PeriodicalName\":\"Derecho Sociedad\",\"FirstCategoryId\":\"1085\",\"ListUrlMain\":\"https://doi.org/10.21897/ds.v1i3.1491\",\"RegionNum\":0,\"RegionCategory\":null,\"ArticlePicture\":[],\"TitleCN\":null,\"AbstractTextCN\":null,\"PMCID\":null,\"EPubDate\":\"\",\"PubModel\":\"\",\"JCR\":\"\",\"JCRName\":\"\",\"Score\":null,\"Total\":0}","platform":"Semanticscholar","paperid":null,"PeriodicalName":"Derecho Sociedad","FirstCategoryId":"1085","ListUrlMain":"https://doi.org/10.21897/ds.v1i3.1491","RegionNum":0,"RegionCategory":null,"ArticlePicture":[],"TitleCN":null,"AbstractTextCN":null,"PMCID":null,"EPubDate":"","PubModel":"","JCR":"","JCRName":"","Score":null,"Total":0}
El propósito de este artículo es aportar algunas reflexiones en torno a la discusión de la única respuesta correcta, a partir de la postura de Robert Alexy, estableciendo sus concordancias y contraposiciones en relación con la tesis originalmente planteada por Ronald Dworkin, quien parte de la idea de un juez dotado de la capacidad y deber de interpretar acertadamente la norma superior en todos los casos. Para este autor, los textos constitucionales –en especial– los que enuncian los derechos fundamentales contienen básicamente una verdad sustancial y palpable aplicable a cada controversia jurídica, de tal manera que el intérprete debe ocuparse en descubrir esta única verdad, mediante la lectura moral de los principios. Al contrario, Robert Alexy sostiene que existen –al menos– tres formas de dar respuesta a un problema jurídico, primero racional, después práctico moral y finalmente jurídico; dando pie entonces para la apertura del debate sobre lo que es el derecho real y lo que debería ser. En tal caso, el dispositivo que articula estas tres formas, es la teoría de la argumentación jurídica. Desde la perspectiva alexiana, es imposible que exista una única respuesta para todo proceso jurídico. Los hallazgos indican que no existen aún medidas que hagan de esto, algo real; la idea de una única respuesta correcta es una utopía que promete un derecho perfecto donde cada veredicto y cada sentencia sea eficiente y complazca a todas las personas, sin embargo, esto actualmente no es posible