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Tiempo después, se le exige al feminismo reconfigurarse y dar cuenta de las diversas formas de dominación que se traslapan para entretejerse y actuar sobre las cuerpas “otras”, es decir las cuerpas colonizadas, racializadas, doblemente subordinadas. Este reconocimiento de la diversidad en términos de opresión y privilegio es denominado ‘interseccionalidad’ (Crenshaw, 1991), esto se vuelve un punto clave para el feminismo, en tanto que amplía su campo de visión y lo fuerza a dar un lugar a las voces que desconoció en su planteamiento inicial. Es entonces cuando las voces subalternas generan su propio [re]conocimiento, de forma localizada y crítica, para crear un feminismo mucho más completo, en cuanto busca desmantelar los cimientos mismos de un mundo que sistémicamente ejerce redes de opresión eurocéntrica-patriarcal-colonial-racista-capitalista al tener una perspectiva más amplia de los mecanismos de opresión que utiliza por ser una visión subalterna. 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摘要
正如女权主义最初形成的那样,这些要求是种族中心主义、阶级主义和种族主义的。它是围绕白人和资产阶级女性建立的,没有考虑到那些不属于这一类的人——甚至没有意识到女性的某些身体,而是将她们归类为动物(Lozano Lerma, 2014)。这种女权主义从种族分化的需要出发——带有至上主义的逻辑——来赞美白人女性,在这个过程中排斥种族化的女性,保护前者不承担复制这些话语的责任(Najmabadi, 2005)。后来,女权主义被要求重新配置和解释各种形式的统治,这些统治相互交织,并对“他人”的身体起作用,即被殖民的、种族化的、双重从属的身体。承认多样性的压迫和特权是名为‘interseccionalidad克,1991年),这是让一个女权主义,而关键在于扩展其远见和力量把他交给一个地方声音desconoció最初在其处理办法。那时,当下级生成自己的声音[re]知识,本地化的方式和重要,创造一个女权主义更加完整,一旦找到拆除基础网络sistémicamente对世界有一个更加广阔的视角时压迫eurocéntrica-patriarcal-colonial-racista-capitalista压迫机制,使用第二位,是一个愿景。这种女权主义将被定位在它被称为的非殖民领域内,并在非殖民女权主义网络中移动(Red de Feminismos non - colonial, 2014)。
Puede hablar el sujeto subalterno: Un breve estudio sobre el feminismo decolonial desde y para Abya Yala
Tal como se configuró el feminismo en un principio, las reivindicaciones eran etnocéntricas, clasistas y racistas. Fue construido en torno a las mujeres blancas y burguesas, y no daba cuenta de aquellas que no entraban dentro de esa categoría - incluso desconociendo ciertas cuerpas como mujeres, para categorizarlas como animales (Lozano Lerma, 2014). Este feminismo parte de la necesidad de diferenciación racial - con lógicas supremacistas- para enaltecer a las mujeres blancas, y en el proceso excluye a las racializadas, blindando a las primeras de su responsabilidad en la reproducción de estos discursos (Najmabadi, 2005). Tiempo después, se le exige al feminismo reconfigurarse y dar cuenta de las diversas formas de dominación que se traslapan para entretejerse y actuar sobre las cuerpas “otras”, es decir las cuerpas colonizadas, racializadas, doblemente subordinadas. Este reconocimiento de la diversidad en términos de opresión y privilegio es denominado ‘interseccionalidad’ (Crenshaw, 1991), esto se vuelve un punto clave para el feminismo, en tanto que amplía su campo de visión y lo fuerza a dar un lugar a las voces que desconoció en su planteamiento inicial. Es entonces cuando las voces subalternas generan su propio [re]conocimiento, de forma localizada y crítica, para crear un feminismo mucho más completo, en cuanto busca desmantelar los cimientos mismos de un mundo que sistémicamente ejerce redes de opresión eurocéntrica-patriarcal-colonial-racista-capitalista al tener una perspectiva más amplia de los mecanismos de opresión que utiliza por ser una visión subalterna. Este feminismo será situado dentro del que se denomina y transita en el ámbito decolonial (Red de Feminismos Decoloniales, 2014).