Manuel Payno: la sangre de Los Bandidos

Manuel Payno was a multifaceted character as the whole of his work. During his life, he worked as a civil servant, military officer, congressman, journalist, diplomat, teacher and writer. His most notable novel is The Bandits from Río Frío. A Naturalistic and Humorous Novel of Customs, Crimes and Horrors, which has been acclaimed by literary critics as the most renowned work of social customs in 19th century Mexican literature. The text portrays the daily life of the different sectors that made up Mexican society in the decades immediately following the country’s independence, when its separation from the Spanish monarchy was sealed. In the time span covered by the work, the insecurity on the roads, banditry, assault, robbery, kidnapping, smuggling, institutional corruption, and the disparity between the opulence of a minority and the misery of the majority emerge as distinctive features of the new country. The numerous calamities that afflicted the newly established nation are depicted throughout the extensive narrative, where blood and its multiple treatment are the primary focus of the present text. The bandits who operated in the area of Río Frío, an obligatory stop on the national road that connected Mexi co and Puebla through the stagecoach system, stand out for their infamous bloodshed. Manuel Payno fue un personaje polifacético como el conjunto de su obra. En el transcurso de su vida se desempeñó como funcionario, militar, diputado, periodista, diplomático, maestro y literato. Su novela más notable es Los Bandidos de Río Frío. Novela Naturalista, Humorística, de Costumbres, de Crímenes y de Horrores y ha sido distinguida por la crítica literaria como la más célebre obra costumbrista de la literatura mexicana del siglo XIX. El texto retrata la vida cotidiana de los diferentes sectores que componían a la sociedad mexicana en las décadas inmediatas a la independencia del país, al sellarse su separación de la monarquía española. En el espacio temporal que abarca la obra sobresalen como rasgos distintivos del nuevo país la inseguridad en los caminos, el bandidaje, el asalto, el robo, el secuestro, el contrabando, la corrupción institucional, la opulencia de una minoría en contraste con la miseria de la mayoría. El conjunto de males que aquejaban al nuevo país fluye en el cauce de la vasta narración, en donde la sangre y su múltiple tratamiento son el objeto de atención del presente texto; destacan en su infausto derramamiento los bandidos que operaban en la zona de Río Frío, alto obligado en el camino nacional que conectaba a México y Puebla a través del sistema de diligencias.